Por fin llega el momento de demostrar quienes somos,
de emprender y salir a la calle en busca de “la chuleta”, se nos terminan esas
madrugadas largas, esas fiestas extremas y es hora de forjar el camino.
Tus amigos empiezan a
planear, que si la fiesta de graduación, el viaje, juntar la lana, que fulano
no va a ir porque no tiene el dinero completo y a otros no los dejan. En fin el
caso es que no queremos que te quedes sin hacer nada!
¿Por qué es importante mi graduación?
Sencillamente porque
esperaste llegar a ese momento desde que estabas en kínder desde que te
imaginabas como policía o bombero, donde le prometías a tus padres ser el
mejor, y te costó trabajo y dinero llegar a donde estas!
¿Qué puedo hacer?
Seguramente ya
comentaron en tu generación de la tradicional fiesta, donde habrá que organizar
la pachanga; las mujeres preparando su mejor vestido y los hombres en las
mejores galas. Todo sea por un día festejar la quemada de pestaña ¿vale la pena
no?
Y porque no, hay otros que deciden festejar a otros lugares,
optando por un viaje grupal, altamente recomendable. Es como si el salir de la
ciudad te produjera cierta dosis de adrenalina que explotas en otros lugares,
curioso pero cierto.
No olvides que la esencia de este evento es que reconozcas
el esfuerzo que realizaste día a día para lograrlo, date tu espacio, tu momento
para convivir con tus compañeros que no sabes hasta que día volverá a estar el
grupo completo.
Si actitud tienes y
ganas te sobran ¿Qué te impide divertirte? El dinero no es problema, te
proponemos un endeudamiento sano que te permitirá tener tu fiesta de graduación, y no
quedarte con ese hueco en la memoria.
Recuerda que tienes
un gran aliado que se propone todos los días a no darte sólo un producto, sino
una experiencia.